23 de mayo 2019
Los sucesivos y monocromos gobiernos regionales han consentido la degradación de la laguna hasta extremos inimaginables y por si esto fuera poco, a lo largo de la última legislatura se han bloqueado, manipulado y entorpecido todas las iniciativas adoptadas y propuestas, tanto desde la sociedad, como desde la Asamblea Regional.
Si se repite un gobierno regional del mismo signo, las posibilidades de recuperación de la laguna serán muy escasas.
El Mar Menor necesita nuevos gestores, capaces de hacer cumplir, desde el primer día, la Ley de Medidas Urgentes, de rescatar y aprobar los Planes de Gestión y la Ley Orgánica del Mar Menor, de suprimir de una vez y por todas, los regadíos ilegales y los continuos vertidos.
También necesita nuevos ayuntamientos sin una visión acomplejada de su patrimonio, que no intenten convertir la singularidad de este espectacular espacio en otros modelos incompatibles a base de regeneraciones, dragados y continuos aportes de arena.
En definitiva, es preciso un cambio en las diferentes administraciones, que sean capaces de velar por el interés público y que no actúen al dictado de los grandes intereses económicos. Que contemplen el patrimonio natural y cultural como una gran oportunidad de desarrollo sostenible y no como un escollo para la actividad económica.
Grupo de Coordinación de Pacto por el Mar Menor
Diario de La Manga