En primer lugar, conviene recordar que el Comité Científico mostró en su informe de febrero 2017 su rechazo a los dragados y “regeneraciones” de playas en las riberas del Mar Menor con maquinaria pesada. Además, se realizan en canales de conexión entre el Mar Menor y el Mediterráneo aumentando su conectividad, algo que también se ha destacado como impacto negativo para la laguna salada.
Por si esto no fuera suficiente, se ha obviado el preceptivo estudio serio y riguroso sobre los impactos ambientales de los dragados, y los impactos del vertido y allanado de dichos sedimentos en las playas de destino, y su efecto sobre el gravemente afectado ecosistema del Mar Menor, y concretamente sobre los espacios y especies protegidos.
En este contexto, los resultados de las analíticas de los sedimentos extraídos nos enfrentan a varias derivadas:
1.- Los dragados han sido precipitados y sin estudios previos. Si se hubiera cumplido con la legalidad vigente, se hubiera procedido a una evaluación ambiental y de repercusiones que, entre otras cosas, habría realizado una caracterización previa de los sedimentos a extraer, antes de producirse el dragado, la cual hubiera revelado el carácter NO APTO para su uso de esos sedimentos por exceso de metales pesados, y en alguno de los puntos por contaminación microbiana. Esto demuestra que realizar estudios previos es necesario, para evitar males mayores.
2.-Debe paralizarse el dragado y el vertido de dichas arenas NO APTAS en las playas del Mar Menor.
Se plantean dos escenarios posibles respecto a las playas receptoras:
a) Que las arenas de las playas receptoras contengan la misma cantidad de metales pesados que las arenas dragadas: Debe paralizarse la “regeneración”.
Si este fuera el caso, no sólo no habría que seguir contaminándolas con más arena NO APTA, sino que habría que aclarar si son playas realmente APTAS para el uso turístico recreativo por motivos de salubridad de sus arenas. Desconocemos hasta qué punto se está estudiado este extremo por parte de las administraciones competentes.
b) Que las arenas de las playas receptoras no tengan niveles insalubres de metales pesados: Debe paralizarse la “regeneración”.
Si las playas tienen arena Apta, no se debe comprometer su uso actual y futuro contaminándolas con arenas NO APTAS, tanto por los riesgos para la salud humana, como por los efectos contaminantes por metales pesados y otros efectos físicos y ambientales del vertido y remoción de arenas sobre la ribera y ecosistema lagunar, así como sobre las comunidades biológicas que las habitan.
3.- Exigimos a las administraciones competentes que nos informen sobre qué acciones se han derivado tras los estudios recientes de investigadores de la UPCT que mostraban la presencia de metales pesados en los sedimentos del Mar Menor. En concreto queremos saber si la administración ha hecho una caracterización por zonas de los sedimentos sumergidos y de las arenas de las playas del Mar Menor. También, si se han detectado niveles NO APTOS de metales pesados o de cualquier contaminante de los ya descritos en estudios sectoriales previos (como productos fitosanitarios, glifosato, antibióticos o cualquier otra sustancia potencialmente nociva para la salud) que impidan su uso turístico/recreativo. También, si se están haciendo campañas de análisis periódicos para estudiar la evolución y movimiento de los metales pesados en los sedimentos de la laguna salada. En definitiva, pedimos transparencia en cuanto a qué parámetros se están estudiando, la frecuencia, los puntos y sus resultados.
Además, consideramos imprescindible que la administración inicie estudios periódicos de caracterización de los sedimentos, determinando los niveles de metales pesados y la fórmula química en la que están presentes, que ayude a comprender y predecir su evolución frente a los cambios que está sufriendo la laguna en los últimos años, para anticiparse posibles problemas futuros.
Por todo ello, las organizaciones firmantes anuncian que solicitarán a las autoridades competentes de manera formal e inmediata la paralización de los dragados y vertido de arenas a las playas.
También anuncian que han solicitado una reunión urgente entre las organizaciones y las administraciones implicadas, como son la Demarcación de Costas y la Oficina de Impulso Socieconómico del Medio Ambiente, para que se les facilite de primera mano la información requerida en este comunicado, así como sobre las posibles acciones que se derivan de la misma.
Organizaciones firmantes
- Plataforma “Pacto por el Mar Menor”
- Federación de Asociaciones de Vecinos de Cartagena y Comarca
- Asociación de Naturalistas el Sureste (ANSE)
- Ecologistas en Acción
Extracción de arena en el canal de Marchamalo |