Las abundantes lluvias de estos días de marzo están arrastrando al Mar Menor toneladas de sedimentos procedentes de las fincas agrícolas de su entorno. Estos sedimentos contienen abundantes fertilizantes y agroquímicos que podrían producir otra crisis eutrófica con resultado de muerte de flora y fauna este verano.
La turbidez que ocasionan estos arrastres en las aguas impiden que la luz solar llegue al fondo y por lo tanto que las praderas de vegetales marinos no puedan realizar la fotosíntesis.
Lo más preocupante es que la situación a finales de marzo de 2022 es aún peor, no sólo por los parámetros ambientales que actualmente presenta el Mar Menor ya de por sí muy inquietantes, sino porque los aportes extras de nutrientes asociados al polvo sahariano, el arrastre de los mismos por las abundantes lluvias de estos días y el aumento de las temperaturas conforme avanza el año, nos hacen temer crisis similares o incluso superiores a las anteriores.
Entrada de sedimentos en el Mar Menor. Marzo 2022 |